Mi Historia

Quiero contar mi historia. Cuando yo era un adolescente yo deseaba nada más pero tener novia, besarla y quizás hacer amor a ella. Pero estaba tímido con las chicas y no tuve una novia en la escuela secundaria.

Salé la universidad después un año. No quise estudiar, quise para trabajar. Hallé los trabajos, y un amigo y yo alquilamos un apartamento. Supe que mi amigo fue gay, no me molestó, y no tuve ningún deseo hacer amor con un hombre.

Pronto tuve una novia y casamos. Trabajé dos trabajos para sobrevivir y sexo con mi mujer se ralentizó después el llegado de nuestras niñas. Un día, caminando en la ciudad esperando por mi segundo trabajo para comenzar fui adentro de una tienda de vídeos. Tuvo una sección al frente de la tienda con vídeos para comprar. En la parte de atrás eran cabinas donde con veinticinco centavos el minuto pude mirar una grabación sexual.

Quise mirar el vídeo y hacer una paja. Puse las monedas en la máquina, abrí mis pantalones y me toqué. No había visto el hoyo en la pared entre la cabina mio y la próxima. Luego, la luz in la próxima cabina se encendió y oí el sonido de moneda cayendo en su máquina. La luz se apagó y una mano fue por el hoyo y paró. Una voz me suspiró para permitirle tocar mi verga. El hombre él me había estado observando.

Le di mi verga en su mano. Suavemente me tocó y cerré mis ojos y disfruté la sensación. Cuando me preguntó si quise estar chupado puse mi polla por el hoyo mientras su boca me envolvió. Muy pronto corrí y mi leche bombeó por su garganta.

Rápidamente me vestí y salí. Esa noche, en mi cama con mi esposa a mi lado, pensé qué ha pasado y me pregunté si voy a ir allí otra vez. El pensamiento de un hombre chupándome no me hizo pensar que yo era gay, pero más y más me pregunté si me gustaría para chupar una polla. Decidí que debo intentarlo.

Regresé a la tienda de vídeos y entré una cabina. La cabina próxima estaba ocupada y mirando por el hoyo en la pared vi un hombre con su polla erecta mirando a un vídeo de una orgía gay. Puse un dedo por el hoyo y él entendió qué yo quise. Él puse su verga por el hoyo y adentro de mi boca abierta. La chupé hasta corrió y bebí toda su leche. Él salió de la cabina y un otro hombre entró. Repetimos el proceso y pronto todos los hombre en la tienda supieron que estaba una boca esperando por ellos. Cuando mi estomago era lleno de leche, hice una paja y salé.

Pero no estaba satisfecho con solamente mi boca recibiendo las pollas. La próximo día, regresé a la tienda. No entré una cabina hasta vi el hombre que yo quise. Era una hombre negro, alto, y pensé que quizás tuvo una polla muy grande. Fui adentro de la cabina junto de él y esperé. Después de pocos minutos bajé mis pantalones y puse mi culo contra el hoyo.

Sentí sus manos acariciando mis nalgas. Oí escupe y usó su saliva para lubricar mi ano. Insertó un dedo adentro de mi, luego un otro. Cuando yo estaba lubricado suficiente trajo su polla a mi hoyo y con un empujón fuerte me entró. Me desmayé casi. El dolor y presión estaban demasiado. Suspiré a él para ir más despacio y paró con su verga adentro de mi parcialmente. Esperamos en silencio así hasta el dolor bajó. Luego empujé contra de él y me entró completamente and comenzó moviendo adentro y afuera de mi.

Me dolió pero no quise que paró. En pocos minutos corrió adentro de mi culo y la leche cayó bajo de mis piernas. Supe en ese minutos qué necesité. Necesité estar usado como una puta, bebiendo la leche de muchos hombres y tener mi culo llenado con muchas vergas.

Esa noche, buscando en internet, rápidamente hallé dónde debo ir. En mi pueblo hubo un club para swingers, algunas noches para hombres y mujeres y algunas noches para hombres solamente. Fui allí, me desvestí en el vestuario y entré el club. La luz estaba bajo pero pude ver muchos hombres haciendo todos tipos de sexo. Un hombre desnudo y como un oso me hizo señas para acercarme más y me dijo para chuparle. Sin vacilación caí de rodillas y abrí mi boca. Su polla era largo y grueso y me amordacé. Me dio una bofetada y me dijo que no vomitara. Tragué y continué chupando su chorizo.

Cuando corrió vi que hubo una línea de hombres esperando un turno. Me tomaron a una sofá que estaba en el medio del cuarto. Con mis rodillas en el sofá y mi estomago en la espalda de la sofá los hombres pudieron tomar mi cara y culo. Sentí labios en mi ano, lubricarlo y prepararlo estar follado. Dos hombres a mi cara tomaron turnos en mi boca mientras me atraganté y escupí. Sentí la presión de una polla a mi culo, empujando contra mi ano y luego me entró. Pusieron mis manos atrás mi espalda y con una soga ellos me ataron las muñecas.

Perdí todo el control y no pude pararlos, pero no quise que paran. Escupieron en mi cara y culo y a veces los abofetearon. Cuando un hombre corrió en mi culo, me dio su verga para limpiar con mi lengua, y probé su leche y mi mierda en su polla. Mis intestinos estaba llenos de leche y mi estomago también. ¿Cuántos hombres corrieron en mi? Perdí la cuenta.

Cuando la acción se ralentizó me tomaron a un parte del club diferente. El piso estaba cubierto con plástico y me senté en rodillas sobre él. Hombres se pararon a mi alrededor y entendí que fui a recibir una ducha dorada. Orinaron en mi cara, cabeza y pecho y me dijeron para abrir mi boca para más. La orina me picó y mantuve los ojos cerrados hasta que se detuvieron. Cuando no más sentí la orina caliente abrí mis ojos y vi que estaba solo. Me puse de pie, hallé una ducha, me limpié, me vestí y salí.

Me dolió mi culo y el leche corrió de mi culo empañando mi ropa interior. Cuando llegué a mi casa, me duché otra vez y fui a la cama. Mi esposa y las niñas estaban visitando con sus padres y tuve la casa vacía. Me desperté la mañana próxima, y todavía me sentía adolorido y abusado. Luego oí un golpe en la puerta.

Abrí la puerta y vi el oso de anoche. Con pánico le pregunté como me halló. Me dijo que mientras los hombres me abusaron, abrió el armario donde puse mis ropas y leyó mi dirección en mi licencia. También me dijo que ellos hubieron grabado todo de mi abuso y humillación. Ellos hackearon mi teléfono y tuvieron todos de mi contactos. Si yo no escuchar a su instrucciones la grabación llegaría en los buzones de todos mis contactos.

Se sentó en mi sofá y abrió sus pantalones. Me dijo chuparle mientras me dio mis instrucciones. Cada noche cuando los hombres fueron al club voy a servirlos. También voy a pagar las tarifas de entrada para ellos. Si no asistí él enviaría la filma a mis contactos.

Ahora yo era un esclavo. Mi cuerpo y mi dinero eran de ellos para usar como desearon. Estaba asustado y emocionado. Este servidumbre era qué yo deseé y aprendí que sentí satisfacción cuando perdí todo el control de mi cuerpo y vida. Después recibir su instrucciones me dijo para desvestirme y sentar me en su polla, cara a cara. Su polla entró me culo dolorido y besamos mientras me folló con tierna. Por un rato, no movió en mi, solamente me llenó con su verga mientras nuestras lenguas tocaron. Luego comencé moviendo arriba y abajo, primero lentamente, luego más rápidamente. Gritó y vació sus huevos adentro de mi culo y corrí al mismo tiempo sin tocando mi polla. Logré orgasmo sin tocándola.

Se vistió y me dijo cuando debo ir al club otra vez. Le dije que sin duda voy a llegar en tiempo.